-Publicado en Diario Tiempo 11 Nov 2010-
Respeto el libre derecho que tiene la gente de invertir o botar su dinero a la hora de ver películas o consumir entretenimiento, por lo cual creo que se me debe respetar de igual manera si me expreso bien o mal de una película, en este caso mal.
Existen películas y artefactos que no sé de donde se las sacaron y lo que me hace pensar mas es si la gente en algún momento se detiene a pensar la saco de ridiculeces que les venden, tan bajo hemos llegado que ahora la gente ni siquiera cuestiona las películas, por consiguiente no cuestionaran la religión, menos a sus líderes, de libros ni hablemos porque leer es para tontos que se creen mucho, según se es el criterio popular (a menos que leas Coelho sos macizo, maldito consumismo)
Empecemos con una película de esas que todo mundo alucina,
1- Saw , en sus diferentes partes (yo pensé que de la dos no iba a pasar) no hace más que presentar a un viejito muy maloso con un fundamentalismo cristiano muy marcado (yo soy, yo castigo) este maitro, en lugar de estar creando tecnología para enamorar chavalas, se la pasa haciendo carnicería con todo aquel que le parezca un mal ser humano y todavía hasta allí se cree pues siempre habrá un descabezado en el mundo que crea que volándole la morra al vecino va a arreglar lo que no le gusta.
Lo que no entiendo es cómo la gente se traga papadas como individuos cortándose los brazos o una pata solo para poder salir de una trampa “ingeniosa” de este asesino. Es decir, creo que solo que te amputes un dedo, en cuestión de minutos te vas a desmayar, no digamos cortándote el antebrazo o la pierna. Pero la mara es feliz viendo sangre, no les basta canal seis, les reto a que se vuelen una mano con una segueta a ver si pasan de la mantequita.
2-Final Destination; si yo estuviera en esa película, la pantalla de la compu me presenta un virus, yo no le creo y le doy CTRL/Alt/Del hasta que el virus se vuelven muy malo y explota el teclado mutilándome los dedos, no sin antes las teclas P, Q hayan saltado a 540 km/hora entrando a los ojos prácticamente dejándome ciego y sangrando por las cuencas, razón por la cual me levantare de la silla, a tientas saldré a la calle y en cuanto un vecino me lleva al hospital, nos cae un F5 del cielo, lo sorprendente es que sobrevivo al impacto, pues lo que al final me mato fue un libro de Calculo 2 que llevaba mi vecino y me partió el cráneo como un “alboroto” de esos que venden en los Catisa. ¿Creíble no?
3-Twilight- Soy un vampiro pero soy Emo, así que soy vegetariano por que en estos días cualquiera te pasa una enfermedad de transmisión sexual en una chupada (de sangre, Mal pensados) así que prefiero dar vueltas por el centro comercial con la payula que dice ser mi novia mientras los pesados coyotes enemigos míos me dicen “Dracu-lero”
4-El Gran Robo- Soy un nuevo dispositivo de una consola que promete ser el futuro en la industria de los videojuegos, soy inalámbrico y me utilizas moviéndome de manera conveniente hacia la pantalla ¡oh no! Aparentemente ya existe algo así, un tal wii (ha de ser francés) lo mejor que podemos hacer es disimular, hare que el departamento de mercadeo me pinte de negro y que me ponga en la punta una bola de desodorante con una lucecita de navidad adentro, ya verán como despisto a todo mundo. ¿Sabes quién soy?
Conclusión, las películas de Jolivu hoy en día son tan malas como las apuestas de PlayStation, lo siento amigos, de verdad lo siento, me han defraudado. Pierdan la pena, llamen a Nintendo por ideas.
1 comentario:
luis sin duda hace falta ese tipo de relatos en la radio como el de cmo seria tu muerte en destino final. jajajajaja
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